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Jardín detrás de Calle J.J. Domine

  Hoy he ido al Jardín de detrás de la Calle Juan José Domine . Es un jardín muy pequeño y que aglutina una serie de equipamientos diversos...

viernes, marzo 08, 2024

El mercader de libros de Luis Zueco

 El mercader de libros de Luis Zueco

El libro narra las peripecias de un muchacho llamado Thomas Babel desde su Augsburgo natal hasta el puerto de Sevilla desde donde parten los únicos barcos hacia las Indias Occidentales. Estamos a comienzos del Siglo XVI, y Thomas tiene que escapar de Alemania hacia el sur debido a un malentendido. El libro entrecruza de forma genial multitud de historias y las condensa en tan sólo 600 páginas. Está bastante claro que el protagonista de esta historia se guía por dos libros en concreto: la Iliada y la Odisea. La idea se la da un vividor Napolitano con quien se cruza y con el que viaja de país en país hablando del Nuevo Mundo en el que el Napolitano ha estado. Eso de la Iliada y la Odisea me recuerda a cuando yo era adolescente y estaba en esa etapa de joder a todo el mundo escuchando canciones de Raimon, Lluis Llach, Al tall, Cadafal, Paco Muñoz … había una canción de Lluis Llach llamada Itaca, a esa canción me recuerdan esas cosas.

martes, marzo 05, 2024

La judía de Toledo de Lion Feuchtwanger

 

La judía de Toledo de Lion Feuchtwanger



El libro te vende que habla del amor entre el rey de Castilla Alfonso VIII y la Judía Raquel que el pueblo llamó "la Fermosa" (todo empieza porque la Fermosa se "burla", o eso le parece a Alfonso, del muy sencillo y algo burdo castillo del rey en Burgos. Por ello Alfonso reconstruye un palacete árabe olvidado y lleno de brozas llamado La Galiana), pero el libro en su mayor parte trata de cómo se desenvuelve el padre de la Fermosa, Don Jehuda Ibn Esra como nuevo escribano y alfaquí del rey intentando refrenar los impulsos caballerescos de Don Alfonso y al mismo tiempo tratando de sacar el mayor provecho posible de los recursos económicos inexplorados de Castilla.

Debe ser bonito contemplar la ilustración original de la portada del volumen que tengo. Lo he agrandado con la lupa que tenía mi padre (sí, mi papi tenía una lupa y el vuestro no, cómo jode eh?) bueno, y después de la tontería de turno (pido perdón, pero no se me ha ocurrido otra cosa) diré que la ilustración es Carlomagno con su ejército bajo los muros de Pamplona del Siglo XIV.

miércoles, febrero 28, 2024

Corto paseo por el Jardín del Turia

 El otro día fui a comprar mi alimento espiritual al centro de Valencia. A la vuelta, decidí ir un tramo paseando a través del jardín del Turia y me bajé al cauce viejo donde comienza la Avenida del Puerto desde donde hay una efigie de hierro que en mi imaginación es un rostro quizá de un fenicio o de un antiguo habitante de Tartessos, ¿quien sabe? mirando hacia arriba y con el cuello estirado y una barba en punta hacia sí mismo. Bueno, me bajé justo por allí. En la rampa de bajada vi un boquete que me pareció en su momento la apertura de la boca de la verdad delante de la iglesia de Santa María en Cosmedin de Roma donde Gregorio el Pecas hace la pantomima esa de que la boca le come la mano en la película Vacaciones en Roma. Pero como yo no soy Gregory Peck ni las mujeres actuales son tan impresionables como Audry Hepburn no coló. Caminé unos metros y me encontré con una laguna alargada la cual yo creo que era sin lugar a dudas nada más y nada menos que la Laguna Estigia. Esta creencia se vio reforzada por el hecho irrefutable de que al comienzo y al final de esta laguna hay dos templetes de columnas evidentemente dóricas y muy similares en apariencia al templo de Segesta en Sicilia. No sé qué abracadabra se utilizó para que una laguna del inframundo griego apareciera en pleno centro de Valencia, pero es Guay del Paraguay.

Cabeza estirada del fenicio o tartesio


 

 


 


 


Ya más adelante me encontré con la nave estilo invernadero que es el Palau de la Música. No me verás allí. A mi la música de todo tipo me produce alergias. Luego está el Parque Gulliver, pero yo con mis 56 años prefiero no acercarme demasiado a esos lugares infantiles o ya veo a un grupo de mamás persiguiéndome escoba en mano. Así que salí por una rampa donde había una entrada a un restaurante de aspecto asaz pijo y de rascarse bastante el bolsillo llamado el Llit del Turia.

Wikipedia

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