Tres noches de Alborán de Francisco Ojeda Villarejo

 

Hoy he terminado de leer un libro que se llama Tres noches de Alborán de Francisco Ojeda Villarejo.

Todo comienza de forma bastante sinuosa, sin decir las cosas muy claramente, como si fueran niñitas de 7 años soltándose secretitos. Una persona, de cuyo nombre no puedo acordarme – vamos a llamarle X – va a la isla de Alborán para organizar la Regata del Mar de Alborán. El viaje lo hace acompañado del Teniente de Navío Martínez de Irujo, Patrón de la nave que allí conduce a X y amigo del Comandante de Alborán, Núñez de Lezo. En el viaje de ida Irujo le contó a X algo muy curioso. Le dijo que hace nada Núñez de Lezo y él eran compañeros de Promoción y en la Base había una “prueba” que realizaba todo el mundo. Se trataba de pasar volando bajo con un helicóptero por debajo de un puente de las cercanías. Pues bien, a Núñez de Lezo no se le ocurrió nada mejor que hacer la “prueba” cuando llevaba a un Alto Mando a bordo. Los gritos que pegó se oirían en Luxemburgo. Lo salvó el hecho de pertenecer a una familia de militares que se remonta hasta no se sabe cuándo, pero se pensó que una temporada en la isla ayudaría a su temperamento.

Bueno en Alborán, aparte de poner los altavoces de la isla a todo volumen con un disco de las la Cabalgata de las Valkirias de Wagner, dice haber sido visitado en tres ocasiones por tres personajes de épocas dispares. Cuando X, aficionado a la Crónica Histórica y a la Leyenda, parece hallar algún indicio en unos dibujos que ha hecho Núñez de Lezo – gran dibujante – este último decide iniciar los tres relatos.