Expediente Hermes de Sabino Cabeza Abuín
Todo comienza con la diosa guerrera hindú Durga
fastidiándola por amor cerca del asteroide Vesta
porque un tío se la había camelado, y todos sabemos que
Vesta es algo mogigata por decirlo suavemente (Vale,
lo de la diosa hindú es coña, pero molaría eh?, pero es cierto que
Durga Deckett se enamoró de un capullo cerca de ese asteroide y tuvo un
incidente con una lanzadera, y aunque se le exoneró de cualquier culpa,
ella lo recuerda amargamente y le pasa factura emocional), así que es
lógico que en su nuevo curro como Jefa de Seguridad a bordo del SC SChettino de la
Compañía Starliner Cruises que realiza un crucero vacacional entre
la Tierra, Marte y Júpiter, tenga una vida personal en la que le
cuesta dejarse querer. En ese orden de cosas ha de resolver el
homicidio de la diva conocida en todos los Nodos Sociales del Sistema
Solar, la Multimillonaria e Influencer Condesa Planck. En ese
homicidio el bot para el placer de Condesa Planck puede ser víctima,
sospechoso o testigo. Y encima no saben cómo llamarlo, si cosa, si
Hermes (su nombre), o si Señor Lagrange (porque el bot tiene
apellido), vamos un follón, pero un follón muy entretenido de 496
páginas.