Siempre me ha gustado más Miss Marple que Hercules Poirot pero si
tuviera que argumentar esa preferencia las pasaría canutas. Solo
puedo recurrir a la declaración aquella de Mourinho de que le
gustaba más Diego López que Casillas y que era así de simple,
porque si intentase explicarlo más profundamente me vería en un
serio aprieto.
Bueno, una mañana en el pueblecito de Chipping Cleghorn apareció en
las noticias locales - en la Gazette un diario local - : “se
anuncia un asesinato que se cometerá el viernes veintinueve de
octubre en Little Paddocks, a las 6 y media de la tarde. Amigos,
acepten este único aviso”. Evidentemente este anuncio crea una
expectación tremenda en todo el vecindario, la mayoría jubilados y
gente retirada de diversas carreras. Pasará de verdad? Será una
broma? Será un juego? Y claro todos acuden en avalancha a curiosear
a casa de Letitia Blacklock que vive en ese lugar. Pero ocurre que en
el día y hora anunciados no se dedican solamente a jugar, ni a reír
entre vecinos, sino que intentan de verdad asesinar a la anfitriona y
se telefonea a la policía.