Bueno, hoy he ido al Parque del Oeste, he salido para coger el tranvía hasta Maritim y la primera en la frente, me cruzo en la calle con un trío (sí, un trío no me seáis guarridongos, me explico, una pareja pero de tres), repito un trío de jóvenes beldades caídas tal vez del Valhalla con unos pantaloncitos mínimos. La cosa empezaba bien. Luego ya cogí el tranvía número 6 y en Maritim el Metro de la línea 5. Me bajé en la estación de la Avenida del Cid, y allí pregunté a un caballero sin caballo que estaba al sol tomándose algo (quizá un sandwich de gominolas) por el Parque del Oeste y me lo dijo enseguida. Le debí de parecer algo tonto del culo porque estaba justo a su espalda. Bien crucé la Avenida de la Plata, digo la del Cid y entré en el Parque y lo primero que vieron mis ojos que se tienen que comer los gusanos fue un caminito muy cuco donde se advierte que los perritos deben ir con correa. Continué por dicho caminito y tras unos kilómetros arribé a lo que creo, no a lo que estoy seguro que es el Gran Lago Baikal. Algo más hacia el interior, pude ver un árbol de ramas caídas que me recordó a la peli en que el Rey Arturo de Camelot se pone enfermo y sus caballeros parten en busca del Grial para sanarlo, pero uno a uno son ejecutados y colgados de un árbol como si fuese una decoración navideña.
Lago Baikal |
El Parque es muy extenso y tiene muchos pasajes por los que pasear, lo que no encontraba era pintadas y eso me extrañaba porque ningún parque o jardín se libra del artista local que quiere plasmar su arte en él. Hasta que por fin las hallé. Pero no eran cosas muy tontas, ni muy guarras, ni sicodélicas. Eran solamente unas ecuaciones matemáticas.
Bueno, cuando ya iba a salir, me topé con un avión haciendo de vientre o haciendo popó creo que es la expresión adecuada. Ya había hecho un montoncito, sabéis? espero que se limpiara porque ir con el mondongo colgando no es que sea muy elegante y no se lo perdonarán, aunque sea de El Ejército del Aire y del Espacio de España. Eso del Espacio es porque se tiene en cuenta que La verdad está ahí fueeeraaaaa. Hay que tener en cuenta que nuestro avión mientras está aposentado sobre so montoncito escatológico, se encuentra mirando la inmensidad de ese espacio.